“Mi máximo orgullo y éxito es mi familia, mis hijos, mis nietos”.
Nacida en Guaymas, Sonora y con residencia en Tijuana desde 1974, la señora Alba González se ha desenvuelto como una auténtica mujer emprendedora, audaz, alegre y dispuesta a sortear los retos que se le presentan sin importar su magnitud.
Compaginando su vida de empresaria icónica de la ciudad, con la de su mayor satisfacción, como lo es la de ser madre de tres sobresalientes deportistas, entre ellos Adrián González, una de las grandes figuras de la MLB durante los últimos tiempos, actualmente doña Alba atiende la coordinación de su empresa D’Alba Eventos.
A punto de cumplir 70 años y 50 de matrimonio, atesora cada trayecto como esposa de don David González, y sus hijos David, Edgar y Adrián, estos dos últimos ligamayoristas en diversos equipos como Padres, Dodgers y Medias Rojas de Boston.
“Mi máximo orgullo y éxito es mi familia, mis hijos, mis nietos”, indicando que sus metas las ha cumplido. “Lo que hemos querido hacer, siempre lo hemos podido alcanzar, a pesar de los problemas que van surgiendo”, acentuando sus pasiones por la lectura, escribir, bailar, viajar y socializar.
Y justo ese don para socializar, la llevó al escenario que ejerce con gran profesionalismo y dedicación, como lo es el de su faceta como empresaria, la cual le ha dado la oportunidad de acompañar a poco más de 14 mil familias tijuanenses en infinidades de eventos, semana a semana durante todo los últimos 37 años en D’Alba Eventos.
“Nos encontramos en el mercado de salones para eventos sociales desde 1985, contando con cuatro, con capacidades de 50 a 500 invitados.”, resaltando que perdurar por tantos años en el mercado, es gracias a siempre ofrecer un servicio de calidad para sus clientes, en donde se les apoya con servicios de banquetes, decoración, música e infinidad de servicios que conforman los distintos paquetes que ofrece D’Alba Eventos, situado sobre la avenida José Gorostiza en Zona Río.
Al conocer la historia de doña Alba no queda ninguna duda en afirmar que detrás, y a los costados de una gran familia, siempre hay una gran mujer que la sostiene, razón por la que ella se ha convertido en el bastión de los suyos. Y al final, sólo nos queda ver el ejemplo que es doña Alba González… el origen del legado de una gran familia.
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