Salud y Bienestar

Las mochilas escolares pueden ser un riesgo para la salud de los niños

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En la víspera del regreso a clases, especialistas en rehabilitación del Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) recomiendan a padres de familia que las mochilas de los estudiantes no excedan el 15 por ciento de su peso corporal para evitar lesiones, principalmente en la columna vertebral.

La doctora Rosa Esther Real De La Cruz, médico del Hospital General Regional número 1 (HGR 1) del IMSS en Tijuana señaló que con esa medida se previenen los dolores de espalda, cuello y  hombros, el  desbalance muscular, así como el dolor de cabeza por tensión en niños y adolescentes.


“Es recomendable que los padres de familia y maestros supervisen que el peso de la mochila no sea mayor a 15 por ciento del peso del menor, ya que su cuerpo aún se encuentra en desarrollo”, destacó la especialista.


En ese sentido, explicó que existen diferentes signos de alerta para que los padres se percaten de que la mochila no es la adecuada; que  el menor cambie constantemente el brazo con que la carga, dificultad para ponérsela o quitársela, marcas rojas a la altura de los hombros y adormecimiento de brazos.


Real de la Cruz señaló que una mochila adecuada debe ser proporcional al tamaño de la espalda, del ancho de sus hombros y que no sobrepase la espalda baja;  debe tener dos correas anchas, acolchadas y ajustables al cuerpo del niño; recordando que más compartimientos favorecen una mejor distribución del peso.


Asimismo, añadió  es importante verificar que esté equilibrada; los útiles más pesados deben estar cerca de la espalda del niño, y se debe usar con ambos tirantes, ya que hacerlo con uno solo ocasiona que se desbalanceen, se inclinen al lado opuesto y haya más curvatura en la columna vertebral.


Añadió que las mochilas con ruedas pueden ser funcionales, siempre y cuando sean grandes y ayuden a mantener el equilibrio y debe tener un  manubrio que se ajuste la estatura del propietario para evitar lesiones en muñecas o manos.


Recomendó, además, que los niños hagan algún ejercicio físico que les ayude a fortalecer y mantener flexibles sus brazos, abdomen y espalda, para reducir el riesgo de sufrir lesiones músculo-esqueléticas.


Al grave problema de cargar un sobrepeso de útiles se suma que los menores padecen de obesidad, por lo que el tiempo prolongado que permanecen sentados con deficiente postura en clases, frente al televisor o la computadora hace que los malestares se incrementen.



Finalmente, informó que el Instituto Mexicano del Seguro Social cuenta con servicios y unidades de traumatología, ortopedia y rehabilitación, en los que se puede valorar a los pequeños y darles manejo específico de sus condiciones.

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