By La arquitectura debe integrar un cúmulo de conocimientos para saber cómo habitar espacios, ser agentes culturales activos y cumplir tareas civilizatorias; de ahí su importancia para ser abordada por profesionales altamente capacitados.
Siendo la arquitectura una profesión ocupada mayormente por población masculina, durante las últimas décadas se ha presentado un aumento en la cantidad de mujeres que deciden acrecentar su participación en la industria. Sin embargo, todavía existen desafíos que enfrentan las arquitectas, como la discriminación de género, falta de oportunidades y equidad salarial.
Muy a pesar de estas circunstancias, las mujeres han logrado hacer importantes contribuciones, estampado el sello de calidad y excelencia en sus obras, demostrando un tesón inquebrantable ante las adversidades.
En México, podemos presumir de contar con el talento de Tatiana Bilbao, Gabriela Carrillo, Magui Peredo, Lorena Vieyra, Gabriela Etchegaray, entre otras, mismas que nos muestran el poderío que tienen en su arte creativo. Por su parte, Baja California cuenta con un número creciente de mujeres que irrumpen a esta profesión exitosamente, desafiando lo sistemático de la sociedad.
Datos del INEGI arrojan que de 2017 al 2021 aumentó la población femenina egresada de la carrera. Aquí, profesionales como Cristina Hermosillo, Erika Lin, Dulce Gómez, la maestra Carmen Trujillo, y exponentes de la nueva generación como Yadira Elizabeth Orozco García, destacan con su trabajo y conocimiento.
“Como mujer, joven, arquitecta y empresaria he pasado por una brecha generacional desde el momento que escogí mi actual profesión. A lo largo de los años, se ha dicho que el ámbito de la construcción siempre ha sido dominado por el hombre, por lo que se ha considerado un terreno de obstáculos, otorgando a la mujer, principalmente, tareas administrativas, de gabinete y pocas veces liderando obras y proyectos”, refiere la directora de Estudio DGO, Dulce Gómez.
“Como arquitecta y dueña de mi despacho, me toca liderar a equipos constructores conformados únicamente por hombres, donde se me ha cuestionado el poder llevarlo a cabo. Sin embargo, a través del profesionalismo y competencia, se demuestra el respeto que siempre se me ha brindado, y lo lejos que se puede llegar trabajando en equipo, hasta incluso recibir comentarios de inspiración por parte de ellos”, agrega.
La directora de Estudio DGO, enfatiza que es importante que las mujeres tengan líderes para poder guiar su transformación, e impulsarse en esta lucha para demostrar que cualquier profesión deberá ser valorada por competencias y talento.
“Nuestra participación tiene que ser mucho más fuerte y activa para desprendernos de cualquier barrera sociocultural y así, evaluar el avance de la igualdad de género”, cuenta.
Yadira Elizabeth Orozco García, egresada de la UABC, destaca que se ha enfrentado a retos que, desafortunadamente, siguen imperando en algunos círculos.
“Somos más propensas a sufrir acoso laboral, sin embargo, estoy segura de que en poco tiempo existirán más compañías guiadas por arquitectas, creadas por y para mujeres recién egresadas, que colaborarán con sus ideas creativas en la ciudad o en todo el Estado”.
Y así como los testimonios de ellas, existen los de miles de mujeres que diariamente desempeñan sus labores profesionales en este loable campo, tan vital para el crecimiento de México. La mujer arquitecta reclama inclusión, respeto e igualdad. Ellas nos ponen el ejemplo de cómo abrir brecha, no desistir y convertirse en ese liderazgo que siempre debe acompañarnos.
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