De aquella tarde en la CDMX, donde Diego Armando Maradona se consagró en el césped del Estadio Azteca, a la noche del 18 de diciembre en Qatar, en la que Lionel Messi se erigió como el mejor jugador de futbol de todos los tiempos, hubo una espera de 36 años para ver al equipo albiceleste como campeón del mundo, tras doblegar a ‘Les blues’. Hoy, Messi presume el único trofeo que le hacía falta en su impresionante vitrina, y ya no hay discusión sobre su legado.
La selección de Argentina derrotó a Francia y se coronó como campeona del Mundial de Qatar 2022, convirtiendo en realidad el sueño de levantar su tercera Copa Mundial, la primera para Lionel Messi, tras negársele en los anteriores cuatro certámenes en los que ha participado el astro rosarino.
Argentina, que se había adjudicado el trofeo en 1978 y 1986, arrancó como uno de los favoritos para conseguir el título en el Mundial de Qatar, pero, tras su primer partido, surgieron las dudas.
Los “ches” arrastraban un invicto de 36 partidos conseguido a lo largo de los dos últimos años, tras la exitosa dirección de Lionel Scaloni, sin embargo, Arabia Saudita los volvió a la senda de la derrota, al doblegarlos 2 goles por 1. Ahí, las alarmas se encendieron.
Ese paso determinó el hambre de triunfo que a la postre haría que Argentina, comandada por un inspirado Lionel Messi y un extravagante Sergio “Dibu” Martínez, derrotará en fila a México, Polonia, Australia, Holanda, Croacia y, finalmente, a Francia, el equipo defensor del título que había conseguido en Rusia 2018.
Siendo la noche del 18 de diciembre en Qatar, aún muy de mañana en México y América Latina, los dirigidos por Scaloni nos regalaron, junto con ‘Les blues’, uno de los juegos más espectaculares y dramáticos de los que se tenga memoria en una copa mundial.
Ahí, en la grama del estadio Lusail, con su triunfo de 4-2 en la tanda de penales, tras empatar 3-3 en tiempo reglamentario, Argentina logró agenciarse la copa por tercera vez en la historia, refrendado así su incuestionable calidad.
Esta ocasión, no hubo fantasmas que aquejaron al plantel, pese a que millones de fanáticos de todo el mundo decidieron apoyar al cuadro galo.
Curados de espanto, los albicelestes desterraron esos turbios pasajes que los seguían desde la final de Italia 90, donde fueron doblegados por Alemania, o por funestas tardes como la ocurrida en Boston durante el mundial de Estados Unidos en 1994, y donde Diego Armando Maradona sería expulsado de la justa, tras dar positivo a un control antidopaje.
Esta vez, la magia, el genio y la personalidad de, un injustamente señalado, Lionel Messi, salió a flote, siendo el encargado de agrupar a un buen equipo, pero carente de grandes estrellas como en otros años.
Hoy, fue el corazón, la gallardía y el “aguante” lo que permitió imponerse a Francia, pese a que en sus filas contó con un inspirado Kylian Mbappé, quien dejó en claro que después de Messi, él será el encargado de llevar el estandarte del mejor jugador del planeta.
El impresionante nivel de Messi
Messi volvió a ser el Messi del Barcelona de Guardiola, aquel que cautivó al mundo del 2008 al 2012.
Pese a su personalidad introvertida, en Qatar, Lío aprendió a ser más canchero y supo cuándo ser más desequilibrante, cuándo alzar la voz, cuándo reclamar y cuándo dar el pase magistralmente exacto.
Para darnos una idea, el crack del PSG nunca había anotado en un partido de eliminación directa en ningún mundial, pero en esta ocasión anotó y asistió en octavos, cuartos y semifinales y, con eso, logró números complicados de igualar o superar.
El periodista español MisterChip dio a conocer en sus análisis que difunde en sus redes sociales que, con los siete goles anotados y las tres asistencias que dio, Messi es «el primer jugador con participación directa en 10+ goles en una edición de la Copa del Mundo desde Maradona en 1986 (5 goles y 5 asistencias)».
Además, MisterChip resaltó que, con los dos goles ante Francia, “Messi es el segundo argentino con doblete en una final de la Copa del Mundo tras Mario Alberto Kempes en 1978″.
También, destaca que, con sus 13 goles y nueve asistencias, Lío se convirtió en el primer jugador en tener participación directa en 22 goles en la Copa, sumado a que «Messi es el jugador con más penaltis lanzados (6) en toda la historia de la Copa del Mundo (sin contar tandas de desempates)».
Entre los otros récords obtenidos por el futbolista están los 26 partidos en mundiales, uno más que el alemán Lothar Matthäus, y logran 2314 minutos jugados en estas instancias. Messi es el jugador con más asistencias y el único en completar pases para gol en cinco eventos distintos.
Además, “La Pulga” batió el récord de aparecer más veces como capitán de su selección, al arribar a 20 duelos. Con 11 ocasiones, es el que más veces ha ganado el premio ‘Jugador del partido’ y, a sus 35 años, es el jugador más joven en participar en cinco mundiales y, a la vez, el más viejo en marcar y asistir en un mismo partido de Copa del Mundo: 35 años, 5 meses y 19 días.
Por si no fueran suficientes esos récords, “La Pulga” ha roto el Internet, al protagonizar la fotografía más viral en la historia de Instagram, al subir una serie de imágenes suyas y del equipo levantando la Copa del Mundo y festejando el triunfo. Su post ya supera los 73 millones de me gusta.
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