Hay quienes llaman a Tijuana “La ciudad sin fronteras” y es que a pesar de que a esta ciudad al norte de México está rodeada por un muro que divide el territorio mexicano y el de Estados Unidos, Tijuana no tiene límites en la creatividad de sus habitantes que han proyectado en la ciudad un despliegue cultural y gastronómico que distingue a Baja California.
La avenida Revolución es la más emblemática de la ciudad. Disfruta de un breve recorrido y vive su folklor. Tómate una foto en su tradicional Arco del que cuelga un letrero con la leyenda “Bienvenido a Tijuana”, para después adentrarte en el mundo de los pequeños locales que lo rodean y exponen piezas artesanales de todas las regiones de México.
Desde ese momento y durante toda tu caminata tendrás que mirar muy bien hacia todas direcciones ya que podrías encontrarte con espacios urbanos intervenidos por artistas plásticos locales. Muestra de ello es el Pasaje Rodríguez, ubicado sobre la avenida Revolución entre la 3era y la 4ta, es un espacio urbano recuperado por artistas y diseñadores. Observa sus murales y visita las galerías con frecuencia podrás platicar con alguno de los artistas que ahí exponen.
Llegó la hora de la comida y que mejor que detenerte en el Caesar’s, ubicado también en avenida Revolución, es el restaurante en donde nació la ensalada césar hace más de 50 años. No te pierdas la oportunidad de degustar la comida Baja Med en el restaurante La Querencia, propiedad del chef Miguel Ángel Gutiérrez, creador del concepto, donde los protagonistas son los productos endémicos de la zona que convergen en tres influencias primordiales: la comida mexicana, la cocina mediterránea y la cocina oriental.
No podrás irte de Tijuana sin recorrer sus playas en también llamada “esquina del mundo” ahí donde el mar fue obligado por el hombre a tener dos nacionalidades y donde un muro simbólico fue arrastrado hasta las primeras olas del océano Pacífico.
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