By Será Petróleos Mexicanos (Pemex) quien pudiera retirar la concesión a la gasolinera “Rendichicas” en caso de comprobar una falta de cumplimientos a las normas de seguridad en los procesos de abasto de combustible, desde las bombas despachadoras.
Así lo dijo el delegado de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco), Filiberto Terrazas Padilla, al reiterar que los afectados deben presentar una queja formal ante ellos, para poder iniciar la investigación y proceso, toda vez que cinco días después del incidente aún nadie lo ha hecho.
El pasado miércoles doce automóviles sufrieron averías en su motor al cargar gasolina presuntamente mezclada con otra sustancia líquida, parecida al agua, en la estación de servicio número 7417, concesionada a la empresa “Rendichicas”, en su sucursal de la colonia Rosario, ante lo que ésta de inmediato ofreció reparar el daño y solicitó un peritaje a Pemex al argüir que la paraestatal entregó un cargamento defectuoso.
Paralelo a ello, la Delegación de la Profeco no ha recibido una sola queja de algún cliente afectado, lo que ameritó el llamado de su responsable, Filiberto Terrazas, para que la presenten con el objetivo de poder actuar en protección de su patrimonio.
“Si aquí a la Profeco no se acercan, quiere decir que no tienen interés o que el problema les fue solucionado por la empresa que afectó el automóvil, pero en ese sentido la Profeco no puede hacer nada si no existe de por medio una queja formal por parte del consumidor”, expuso.
Además, describió que cuando existe un caso como el referido la Procuraduría abre de manera inmediata un expediente y cita al prestador de servicios para tratar de lograr una negociación y, de no hacerlo, se analiza si existe una violación a la Ley Federal de Protección al Consumidor.
Cuando ésta es comprobada se emite un PPIF, que es un procedimiento por infracción a la Ley Federal de Protección al Consumidor, y con base en el problema, la gravedad de éste y el capital social, se impone una sanción económica en los rangos ya establecidos, que además contemplan la reiteración de la falta y la afectación, precisó.
“De ahí la trascendencia de que exista una falta para que la Profeco pueda darle seguimiento. Sin embargo, es Pemex quien tendría que vigilar el comportamiento de la gasolinera, porque es quien surte y tienen controles de seguridad para evitar que el combustible se adultere; entonces tendría que tomar el reporte”, observó.
Reiteró que la Procuraduría del Consumidor basa sus funciones en el ámbito de servicios, como los que brindan las gasolineras o supermercados, pero “quien supervisa directamente a las gasolineras es Pemex. Incluso tiene la facultad de quitarle la concesión al gasolinero”, puntualizó.
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