By Feligreses de la iglesia Católica asistieron al Viacrucis viviente en Catedral de Nuestra Señora de Guadalupe esta mañana, donde de forma simbólica acompañaron a Jesús a lo largo de catorce estaciones que narran desde la detención del hijo de Dios, hasta su crucifixión.
Según datos ofrecidos por agentes de la Dirección de Seguridad Pública Municipal, fueron alrededor de 700 personas las que se congregaron desde las 9:00 de la mañana para ser testigos de la representación de un grupo de jóvenes que estuvo preparándose durante seis meses para llevar a cabo el Viacrucis.
Previo al inicio de la representación, el Obispo de Mexicali José Isidro Guerrero Macías ofreció un mensaje a medios de comunicación, en el que señaló que durante los días de Semana Santa, la comunidad católica debe vivirlos en un estado de recogimiento y oración, por lo que lamentó que ya sea una tradición el que estos días sean utilizados para salir a las playas principalmente. «Es una tradición que se hizo ley pero no hay como vivir en familia estos días, acude a la iglesia, busca al Dios verdadero, así debemos vivir estos días de recogimiento», apuntó.
Minutos después de las 9:00 de la mañana, el Obispo declaró iniciada la presentación y posterior procesión desde un parque aledaño a la Catedral, desde donde personas de todas las edades fueron testigos de la representación de la detención y posterior crucifixión de Cristo, todos resguardados por al menos 13 elementos de la Policía Municipal que estuvieron presentes durante el recorrido para ayudar en caso de presentarse alguna eventualidad.
Como es tradición, el recorrido inició en la calle Obregón de la zona centro de la ciudad, continuaron hasta la calle Pedro F. Peritus y Ramírez donde doblaron hacia la izquierda y luego prosiguieron sobre la avenida Reforma, hasta llegar de nueva cuenta a Catedral.
La detención de Jesús, su trayecto a lo largo de 14 estaciones cargando una pesada cruz y las caídas que sufrió en la que sus seguidores observaron su sufrimiento, fue contagiado a los feligreses que siguieron la representación y una que otra persona dejó caer una lágrima por su rostro al ver cómo era azotado Jesucristo o consolado por su madre.
El final del Viacrucis terminó con la muerte y sepultura de Jesús, posteriormente, el Obispo de Mexicali José Isidro Guerrero Macías, dio la bendición a los presentes, algunos entraron a Catedral y otros se fueron dispersando por las calles del Centro Histórico.
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