By Los jóvenes somos la encarnación de un nuevo mañana quienes mediante la innovación buscamos enderezar lo que se requiera con el fin de tener un bien colectivo. Los jóvenes somos quienes mantenemos viva la flama de la esperanza de México, por lo que cuando se atenta contra esto se nos afecta a todos.
Es por ello que el caso Ayotzinapa ha tocado fibras muy sensibles, hayan sido de cualquier sitio de nuestro país el hecho es grave y debe señalarse no solo para que se hicieran en su momento las investigaciones pertinentes sino que se corrigiera lo que haya que corregir para que en los póstumo no vuelva a suceder. ¿Y qué tranquilidad puede tener un joven sabiendo que en cualquier momento el gobierno puede atentar contra él?
Independientemente de los que pudieran ser culpables y tintes políticos hay que exigir justicia y elementos claros sobre todo para los directamente más afectados que son sus familiares, como ciudadanía habrá que apoyarlos y simultáneamente exigir ahora la certeza de que ningún joven será agredido por ejercer sus derechos.
Trabajemos por defender lo que nos costo tanta sangre obtener, el no respeto a los derechos mas elementales no representa mas que un retroceso.
La integridad de todos generara el bienestar y por lo tanto progreso de México.
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