El pasado 6 de enero la Secretaría de Economía realizó un evento denominado “Inicio de la Zona Libre”, donde el presidente de la República, el Lic. Andrés Manuel López Obrador, anunciaría los beneficios y reglas de operación de la llamada “Zona Libre”, evento al cual fui invitado y, por supuesto, acudí por la importancia del tema y por la necesidad de conocer la aplicación en nuestro estado, del decreto que entró en vigor el primer día del 2019. Sin embargo, el evento, más allá de la mala organización, no resultó lo que esperaba, como tampoco resultó ser el inicio de una zona libre como anhelábamos to-dos, quedando en un decreto de estímulos fiscales para la región fronteriza norte del país.
No obstante, este decreto no es cosa menor, y hay que reconocer el esfuerzo que muestra el gobierno federal por impulsar la competitividad de una región que integra varias ciudades distribuidas en una frontera de más de 3 mil kilómetros, y que agrupa a más de 7 millones de habitantes, con una gran población flotante y con importantes flujos migratorios.
Entrando en materia, este decreto de estímulos fiscales se enfoca en el Impuesto Sobre la Renta (ISR), y en el Impuesto al Valor Agregado (IVA), el cual, a grandes rasgos, consiste en lo siguiente:
El estímulo del ISR se trata de un crédito fiscal equivalente a la tercera parte del Impuesto Sobre la Renta causado en el ejer-cicio anual, o en los pagos provisionales, aplicable a personas físicas o morales con actividad empresarial, y será aplicado en la proporción que representen los ingresos totales de la región fronteriza norte, del total de los ingresos del contribuyente obtenidos en el ejercicio fiscal, o en el periodo que corresponda a los pagos provisionales.
En cuanto al IVA, el estímulo consiste en gozar de un crédito fiscal del 50% de IVA, (pasando del 16% actual al 8%), aplicable en los actos o actividades como enajenación de bienes, prestación de servicios independientes y otorgamiento del uso o goce temporal de bienes; siempre que se realicen en locales o establecimientos ubicados en la Región Fronteriza Norte, don-de el crédito fiscal se aplicará en forma directa sobre la tasa del 50% de IVA.
Cabe hacer mención que es importante leer a detalle este decreto, ya que en ambos casos existen una serie de requisitos y condicionantes que hay que observar y atender para poder acceder a estos beneficios.
Al final de cuentas la zona libre no inició como la esperábamos, sin embargo, la autoridad federal sí plantea una serie de estímulos fiscales a los cuales ya se pueden acceder en las ciudades que integran la región fronteriza, mismas que contienen una población que representa aproximadamente 6% del total de la población del país, y que aportan aproximadamente el 6% del Producto Interno Bruto (PIB) nacional.
Los instrumentos están en la mesa, ahora toca a los demás actores económicos hacer los ajustes correspondientes y ha-brá que esperar los primeros resultados de impacto, y que estas acciones se reflejen verdaderamente en una mayor competitividad en la región, aumente la inversión y el empleo, y con ello se alcancen mejores niveles de bienestar.
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