Para algunas personas son un ritual cotidiano y consideran que tanto el cigarro como el café saben a gloria por la mañana. Sin embargo, los efectos de consumir cafeína y nicotina durante las primeras horas de la mañana son muy diferentes de lo que se cree.
Contrario a lo que se piensa, el primer café que toma un amante de esta bebida en realidad no resulta muy estimulante, pues su adicción a la cafeína es tan fuerte que no obtiene un beneficio real hasta después de varias tazas, según un reciente estudio británico.
¿Bebida estimulante?
«No puedo comenzar el día sin tomar una taza de café. Me pone las pilas por la mañana y su aroma comienza a estimularme. Me despierta y levanta el ánimo. Es lo primero que hago, y no podría pasar sin tomármelo». De acuerdo con psicólogos, aunque los consumidores frecuentes se sienten animados al ingerir la cafeína por la mañana, esa sensación en realidad consiste en una inversión de los efectos fatigantes de la abstinencia aguda.
Después de investigar a 379 adultos con un consumo nulo, mediano y alto de café, especialistas de la Universidad de Bristol comprobaron que los café-adictos desarrollan una tolerancia a los efectos estimulantes de la cafeína, por lo que la sustancia sólo los devuelve a sus niveles básicos de alerta, pero no por encima.
¿Entonces el verdadero estímulo que perciben los consumidores de la famosa bebida llega con la segunda taza de la mañana?.
«Los investigadores todavía no lo han averiguado, pero lo que sí saben es que parte de la excitación placentera causada por la cafeína, proviene del aumento de la misma ansiedad que provoca en el café-adicto», señaló Peter Rogers, miembro del departamento de psicología experimental de Bristol.
El cigarrillo mañanero
«Me pone «en marcha», me lo pide el cuerpo. Lo necesito para comenzar a funcionar» frases de gente que mantiene un intenso ritmo de vida durante todo el día, duerme con su paquete de cigarros en la mesa de noche y enciende uno poco después de que suena el despertador.
De acuerdo a otro trabajo, el cigarro que se fuma al empezar el día es el más nocivo de todos. Los fumadores que consumen cigarrillos inmediatamente al levantarse muestran niveles más altos de nicotina que quienes esperan hasta el desayuno, de acuerdo a un estudio de científicos de la Universidad de Penn State, en Estados Unido. En cambio, las personas que suelen fumar media hora después de despertarse muestran niveles más bajos de esta sustancia química.
«Quienes fuman al levantarse, una conducta clasificada como de alta dependencia, deben emplear estrategias más intensivas que otros fumadores para dejar el hábito de forma sostenida o permanente, asegura el experto Joshua Muscat.
Según los investigadores, el aumento del riesgo de cáncer no se debe al hecho de consumir un cigarro en la primera media hora, sino a que este comportamiento implica que quien necesita fumar rápidamente al comenzar el día presenta una fuerte dependencia psicológica a la nicotina y por tanto, requiere consumirla cada vez más.
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