By El presidente Barack Obama sopesa llevar a cabo un rescate aéreo o establecer un corredor humanitario para los miles de desplazados iraquíes que se encuentran atrapados en el monte Sinyar, en el norte de Irak, y planea tomar una decisión «en cuestión de días», indicó hoy la Casa Blanca.
«Tiene que haber una solución duradera que lleve a esa población a un lugar seguro en el que puedan recibir una asistencia más permanente», dijo el asesor adjunto de seguridad nacional de la Casa Blanca, Ben Rhodes, en una conferencia de prensa.
«Estamos sopesando (abrir) corredores (humanitarios), evacuaciones aéreas y distintas formas de trasladar a la gente que está en un lugar muy peligroso en esa montaña, a una posición más segura», precisó Rhodes.
El principal papel de los 130 asesores militares más que EE.UU. envió este martes al norte de Irak será el de «evaluar cómo sacar a la población de la montaña» e informar a la Casa Blanca sobre opciones viables para el rescate, explicó el funcionario.
Obama espera recibir recomendaciones al respecto «en cuestión de días», porque considera que «no es sostenible» mantener indefinidamente las entregas aéreas de alimentos, agua y medicamentos a los desplazados, indicó Rhodes.
El funcionario destacó que los militares recién llegados a la ciudad de Erbil «no tendrán el rol de entrar en combate sobre el terreno», sino de determinar «cómo proporcionar asistencia humanitaria a esta población afectada».
El avance del Estado Islámico (EI) en Irak ha provocado la huida de unas 200.000 personas en el norte del país y se calcula que más de 40.000, en su mayoría yazidíes kurdos y cristianos, se encuentran todavía atrapados en el monte Sinyar y con necesidad urgente de agua, comida, refugio y medicinas.
Mientras, el Pentágono continuó hoy con sus bombardeos selectivos sobre posiciones de EI cerca del monte Sinyar, y llevó a cabo «alrededor de siete ataques aéreos asociados con esa misión» durante la jornada, informó Rhodes.
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