La música abre las puertas del mundo a las personas.
Alida Guajardo de Cervantes no es música de carrera, pero la ama porque siempre ha sabido que con ella se abren las puertas del mundo a las personas, pero principalmente a los chiquillos que nacen en barrios y colonias donde escasean la economía y las oportunidades.
Con esta convicción irrevocable hasta nuestros días, Alida ha dedicado gran parte de su vida a llevar este arte, y otros, a escuelas de sectores vulnerables, por natural y sencillo amor a su prójimo.
Mientras se le aclaraban proyecto y vocación, primero ensayó con traer a los músicos de la Mainly Mozart de San Diego para que ofrecieran conciertos en Tijuana a gente que podía pagar un boleto; poco tiempo después descifró su destino y decidió que la música clásica (y principalmente la de Mozart), debía llegar a los oídos de los niños más vulnerables de Tijuana.
Pero no sólo para que la escucharan, sino para que exploraran y desarrollaran sus aptitudes musicales. Esa era su idea fundamental e inspiradora. Fue así que en 1992, fundó Promotora de las Bellas Artes junto con gente que compartía con ella gustos e iguales inquietudes.
Y como en otras actividades humanas de inspiración social, se requería financiar la idea, así que se dispuso a buscar patrocinadores y los encontró en personas residentes de Tijuana, también amantes de la música.
La titular de Promotora de las Bellas Artes, es originaria de Mexicali, pero vive en Tijuana desde 1972, está casada desde hace 49 años con el abogado Fernando Cervantes Conde con quien procreó dos hijos. Antes de 1992, la promotora cultural había vivido la vida típica de una madre y ama de casa relativamente acomodada en matrimonio con un exitoso litigante. De muchas maneras tuvo que abandonar el confort doméstico para poner toda su energía y atención a su sueño.
La señora Alida Guajardo de Cervantes es una de nuestras líderes más destacadas de Baja California.
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