By Por: Wendy Plascencia Robledo /Politóloga experta en sociedad y cultura.
El 26 de agosto de 2024, se aprobó una reforma constitucional significativa al Poder Judicial que busca fortalecer la independencia de las instituciones, promover la participación democrática y garantizar un acceso equitativo a la justicia. Sin embargo, ha generado una gran controversia, con opiniones divididas entre quienes apoyan la reforma y quienes ven riesgos potenciales en su implementación.
Algunos puntos clave de esta reforma son la elección popular de Jueces y Magistrados, esto significa que a partir de 2025, los ciudadanos elegirán directamente a jueces, magistrados y ministros. Esta medida busca fomentar la participación democrática en el Poder Judicial, asegurando que las decisiones judiciales reflejen las necesidades y expectativas del público.
En cuanto al Órgano de Administración Judicial se creará una nueva entidad para gestionar el Poder Judicial de manera eficiente y transparente.
El Tribunal de Disciplina Judicial supervisará el desempeño de jueces y magistrados y tendrá la facultad de sancionar actos indebidos para prevenir la corrupción y la impunidad.
La reforma propone fortalecer la independencia del Poder Judicial, evitando la intervención de poderes políticos o fácticos, creando órganos judiciales especializados para mejorar la eficiencia en la resolución de casos; y la selección y formación de jueces y magistrados se mejorará mediante criterios más estrictos y procesos de evaluación claros.
Participación democrática
- Se promoverá una mayor transparencia en la toma de decisiones judiciales y se facilitará la participación ciudadana en la evaluación del desempeño de los jueces y magistrados.
Acceso equitativo a la justicia
- La reforma busca hacer más accesible el sistema judicial mediante la simplificación de trámites y la reducción de costos, lo que beneficiará a poblaciones vulnerables, especialmente en ciudades fronterizas como Tijuana.
- Se propone la implementación de tecnologías que faciliten el acceso a la justicia de manera más ágil y efectiva.
Prevención de corrupción e impunidad
- Se crearán mecanismos de rendición de cuentas para asegurar que el personal judicial actúe conforme a la ley.
- El fortalecimiento de la disciplina judicial y la implementación de políticas de transparencia y ética serán claves para reducir la corrupción y la impunidad dentro del sistema.
Críticas y preocupaciones
A pesar de los objetivos ambiciosos de la reforma, varios sectores están en desacuerdo:
- Politización del Poder Judicial: Permitir que jueces y magistrados sean elegidos por voto popular podría comprometer su imparcialidad, haciendo que se inclinen hacia intereses políticos o mediáticos.
- Riesgo de inestabilidad: La reestructuración del sistema judicial podría generar incertidumbre, sobre todo en la transición hacia este nuevo modelo.
¿Qué significa Tijuana?
En una ciudad como Tijuana, con su dinamismo fronterizo y diversidad poblacional, la reforma promete mejorar el acceso a la justicia, especialmente para los sectores más vulnerables. No obstante, también podría generar inquietudes sobre la independencia judicial y la posible influencia política en los jueces.
¿Democratización o riesgo para la justicia?
La reforma al Poder Judicial es una medida ambiciosa que busca hacer el sistema más accesible y participativo. Sin embargo, las críticas sobre su implementación y el riesgo de politización son elementos importantes que deben ser considerados.
Para Tijuana y otras regiones fronterizas, los efectos de esta reforma podrían ser especialmente significativos, tanto en términos de acceso a la justicia como en la preservación de la independencia judicial.
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