Para celebrar el lanzamiento del nuevo box set del Cuarteto de Liverpool, te presentamos cinco cocteles inspirados en sus mejores álbumes.
1. El Duque
Para el primer álbum, Please Please Me (1963), Bucardón propone un trago de jerez con refresco de naranja, pepino y menta. Conocido como El Duque de Bedford, se trata de un coctel muy veraniego y frío; un trago aperitivo para llevar la noche tranquila. Su frescura casa a la perfección con la primera etapa de la banda. Y el jerez,usado por los españoles para preservar el vino blanco para impulsar su consumo en Inglaterra, conecta el coctel con Reino Unido.
2. Old Fashioned
Con A Hard Day’s Night (1964), los Beatles conquistaron Estados Unidos. Es por eso que, esta vez, el bartender preparó un trago de principios del siglo XIX cuyo corazón es bourbon, acompañado de azúcar y amargo. Un coctel sencillo a base de whisky americano que exuda conceptos como crecimiento por su relación con la era industrial.
3. Martini Bucardón
La naranja china que colorea el martini de la cas, hecho con ginebra Hendrick’s, aporta a este trago tan básico un toque cítrico, medio oriental, que lo hace más jugetón. Con él, Bucardón propone que escuchemos Rubber Soul (1965), un disco que, en muchos sentidos, supuso el principio del cambio para la banda y la apertura a la senda de la experimentación.
4. La Mula
Pese a que la solución fácil para Sgt. Pepper’s Lonley Hearts Club Band (1967) sería escoger un coctel de origen indio, Bórquez prepara un trago de mezcal. En primer lugar, porque usar mezcal es algo básico en la coctelería actual y segundo, porque el juego de especias y la relación de esta bebida con la mescalina y la psicodelia evocan el origen de grabación del álbum.
5. Bee’s Knees
Para terminal, Let it Be (1970) y un coctel clásico para nostálgicos. Bee’s Knees tiene sy origen en los años 30, los tiempos de la Prohibición. La miel y el jugo de limón amarillo se usaban para disfrazar el sabor de la ginebra -un poco más seca en este caso, Beefeater- , porque, en aquel entonces, la producida de manera casera era muy mala. Hoy, sin embargo, se trata de un trago sofisticado y maduro.
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