By A pesar del ajetreo de la vida política, Francisco Vega de Lamadrid mantiene una prioridad en su vida, la cual le ayuda a equilibrar lo que la gente espera de él, pues además de ser el Gobernador del Estado, tiene un papel importante que nunca ha dejado de lado: Ser esposo y padre.
Desde el inicio de su carrera política estuvo consciente de lo que le deparaba a su vida, incluyendo a su familia con la que ha compartido sus triunfos, pero esto le ha valido hacer más compresivos a sus hijos y esposa sobre las necesidades de los bajacalifornianos, haciendo esto más fácil su trabajo al frente del Poder Ejecutivo, silla desde donde nunca ha olvidado sus raíces que provienen de un pequeño pueblo en Sonora.
«Hay que sensibilizar a la familia para que comprenda el trabajo y así poder tener paz y tranquilidad, pues desde el más chiquito hasta el más grande, saben que hay niños con capacidades distintas, que existen colonias donde hace falta el agua y drenaje, que existe gente que no tiene empleo y lo quieren».
«Por esto mi señora y yo tratamos de que todo siga en la normalidad dentro de nuestra familia, aunque es complicado, pero no imposible, siempre tratamos hacerlo», comentó.
Como la base de su vida, Kiko dice necesitar estabilidad con los que ama para poder actuar con coherencia como Gobernador y es por eso que necesita cumplir la promesa de estar con su familia, pues por ellos ha logrado mejorar como ser humano y comprender los motivos que miles de padres de familia tienen para luchar día a día por sus hijos.
«Los domingos estoy con mi familia en el cine o me voy a comer, es decir, trato de seguir esta vida hasta donde se pueda y seguir conviviendo, aunque uno está menos tiempo, éste debe ser de calidad. Convivo con mi familia y les doy todo mi amor y soy correspondido», expresó.
Todo empieza por casa
Por el importante papel que tiene como figura pública, Kiko Vega ha comprendido que uno de los cimientos vitales en la sociedad son los valores que se enseñan en casa, tal como en su hogar se practica el respeto hacia los demás y apoyo a quien más lo necesita, sin prioridades que ayudan a sacar adelante los momentos difíciles que se pueden presentar en la vida.
«Los valores de una familia se desprenden desde los abuelos y después los padres los heredamos con los hijos y por eso es tan importante trabajar a través de la escuela para padres para ayudar a formar seres humanos de bien que busquen salir adelante», destacó.
Recordó que en su niñez no existían las redes sociales y los aditamentos electrónicos, lo cual ha dado un giro drástico a la manera de educar a los niños y jóvenes, pues temas que antes eran imposibles de tratar como la educación sexual, ahora son básicos para mantener un lazo cercano con quienes forjarán el destino del Estado en algunos años.
«Cuando estaba chico no había Facebook ni tabletas, pero hay que recordar que nuestros padres nos educaron de una forma, por lo que hay que educar de una forma distinta a los hijos», añadió.
El Gobernador concluye que su vida es complicada por el compromiso de representar al Estado, no sólo en el país, sino fuera de éste, lo cual le ha ayudado a reconocer el incondicional apoyo que su esposa e hijos han demostrado durante su primer año de gestión.
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