El líder republicano John Boehner alertó ayer de que las medidas ejecutivas anunciadas por el presidente de EU, Barack Obama, para regularizar a cinco millones de indocumentados fomentarán la inmigración ilegal y están “saboteando” cualquier opción de aprobar una reforma en el Congreso.
Las acciones de Obama “animarán a más personas a venir aquí ilegalmente y poner sus vidas en riesgo”, denunció Boehner, presidente de la Cámara de Representantes, en una comparecencia ante la prensa.
Boehner recordó la crisis en la frontera sur del país entre marzo y junio pasado a raíz de la llegada masiva de menores no acompañados, procedentes en su mayoría de Honduras, Guatemala y El Salvador, y pronosticó que “el próximo verano puede ser peor”.
Obama “ha elegido deliberadamente sabotear cualquier posibilidad de promulgar las reformas bipartidistas que dice buscar”, enfatizó Boehner al acusar al mandatario de estar “dañando la Presidencia en sí misma” con sus acciones unilaterales.
El Senado, bajo control demócrata, aprobó un proyecto de ley para una reforma migratoria en junio de 2013 que no ha sido sometido a voto en la Cámara de Representes, donde los republicanos tienen la mayoría desde 2010.
Un año de espera. Tras esperar más de un año a que ese voto se produjera, Obama advirtió en junio pasado que actuaría por su cuenta si el Congreso no le presentaba una ley migratoria para firmarla. El jueves se dirigió a la nación desde la Casa Blanca para anunciar sus medidas, que beneficiarán a 5 de los más de 11 millones de indocumentados que residen en EU.
Obama “emperador”. Minutos antes del discurso del mandatario, Boehner ya arremetió contra Obama, a quien acusó de comportarse como “un emperador o un rey”.
Los republicanos evalúan ahora posibles acciones para frenar las medidas ejecutivas de Obama, según indicó ayer Boehner.
El partido está dividido al respecto, ya que los miembros del Tea Party, el ala más conservadora, son partidarios de dejar al Gobierno sin fondos para funcionar, como ocurrió en octubre del año pasado, y varios de sus líderes prefieren medidas menos radicales, como bloquear el financiamiento necesario para implementar los anuncios migratorios de Obama.
Staff Campestre
Comments