By Oficiales del Departamento de Policía de Santa Ana, California, mataron a balazos al mexicano Ernesto Javier Canepa Díaz el viernes 27 de febrero, informó la Secretaría de Relaciones Exteriores.
En 17 días, policías en Estados Unidos mataron a tiros a tres mexicanos en diferentes hechos, por lo que dicha dependencia expresó su profunda consternación y molestia por el presumiblemente uso excesivo de la fuerza por parte de las autoridades en ese país.
La muerte de Canepa Díaz ocurre a siete días del asesinato de Rubén García Villalpando, en Euless, Texas, y 17 días después del fallecimiento de Antonio Zambrano Montes, en Pasco, Washington.
El gobierno mexicano hizo un llamado al Departamento de Justicia estadunidense para que mediante su división de Derechos Civiles, acompañe la investigación de los tres casos para asegurar que se conduzcan con transparencia y en su caso, se deslinde la debida responsabilidad penal o civil a que haya lugar, ya que estas muertes no pueden verse de manera aislada.
En un comunicado, la SRE se sumó al llamado de diversas organizaciones de la sociedad civil que señalan la urgente necesidad de avanzar en la revisión de las políticas y prácticas de uso de la fuerza.
La dependencia indicó que el domingo 1 de marzo, la cónsul de México en Santa Ana, California, se reunió con los familiares de Canepa Díaz y sus abogados. Además de que desde el primer momento en que supo del incidente, «el consulado les ha ofrecido toda la asistencia que corresponde, incluyendo el acompañamiento cercano a lo largo del proceso de investigación y de representación legal».
Afirmó que la cónsul de México contactó personalmente al jefe de Policía de Santa Ana y el fiscal del Condado de Orange y «les dirigió misivas expresando su profunda preocupación por los hechos ocurridos, pidiendo una investigación exhaustiva y la actualización oportuna de los avances, al tiempo de solicitar se tomen las medidas que prevengan la repetición de incidentes similares».
La SRE afirmó que el gobierno de México «ha solicitado al Grupo de Consulta sobre Derechos Civiles de los Mexicanos en Estados Unidos, explorar opciones legales que permitan responder a este incidente y a otros similares».
«A la consternación de sumar el tercer caso de un mexicano fallecido por el uso excesivo de la fuerza en menos de un mes, se añade la profunda preocupación por el efecto de fractura de confianza entre la comunidad hispana y las fuerzas policiacas que pudiera derivar de estos hechos», indicó.
El gobierno mexicano hizo un llamado a las autoridades de Santa Ana para reconstruir la confianza entre los pobladores hispanos en esa comunidad.
«En estos tres lamentables casos, el gobierno de México hará uso de todos los recursos disponibles para velar por el interés de las familias de las víctimas, con el fin de que tengan pleno acceso a la justicia de conformidad con las leyes aplicables», afirmó.
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