By El registro del Partido del Trabajo (PT) está técnicamente perdido, pese a que aún tiene pendiente en el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) un recurso por resolver, opinó el consejero electoral Marco Antonio Baños.
Sin embargo, consideró prudente que el INE tome la decisión final en el tema hasta que la autoridad jurisdiccional resuelva la solicitud de ese partido de suspender su proceso de liquidación, en tanto no se concreten los comicios extraordinarios en Aguascalientes.
Una vez que ello suceda, la Junta General Ejecutiva del Instituto Nacional Electoral (INE) deberá determinar el momento en el cual se decide en términos de sus facultades que el registro del PT y del Partido Humanista en su caso, han quedado cancelados, añadió en entrevista.
Entonces, falta que el Tribunal defina un medio de impugnación para que se diga cómo proceder en la elección de Aguascalientes. Aquí el PT solicitó una condición suspensiva que significa que tendríamos que esperar hasta que se desahogue la elección extraordinaria en el distrito 01 para saber cuántos votos obtiene y, a partir de esa lógica, tendría que calcularse si conserva o no el registro”, explicó.
En opinión de Baños Martínez, “técnicamente el registro del Partido del Trabajo está perdido y faltaría que la Junta General Ejecutiva determine el momento en el cual se decide en términos de sus facultades que el registro ha quedado cancelado”.
Recordó que la Sala Superior del TEPJF aprobó la votación total válida emitida que debe considerarse a nivel nacional para que un partido conserve su registro y que sirvió de base para que el INE asignara a las fuerzas partidistas el número de diputados de representación proporcional.
Indicó que la reforma constitucional y legal 2014 elevó de dos a tres el umbral para que un partido político mantuviera su registro.
Tanto el PT como el Humanista, precisó, se encuentran en una etapa de prevención para lo cual les fue asignado a cada uno un interventor y, de procederse a la liquidación, esa misma autoridad se hará cargo de llevar a cabo esta etapa la cual podría tomar unos meses.
Expuso que el interventor deberá priorizar el pago a la plantilla laboral, saldar las cuentas pendientes que en su caso pudiera tener el partido y, finalmente, pagar los impuestos y las multas pendientes.
El proceso de liquidación (de un partido) no es un procedimiento sencillo (…) tiene que irse resolviendo paulatinamente como los derechos laborales de la gente que trabaja formalmente para estos institutos, la relación de los bienes inmuebles que tienen, la relación que tengan con empresas acreedoras de bienes y servicios. Es un procedimiento que va llevar algunos meses”, concluyó.
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