By De nuevo se da un hallazgo de especies marinas muertas en las orillas de la laguna Ojo de Liebre, enlútese esta temporada de avistamiento de ballena gris en la península, pues la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (Profepa) dio a conocer que 150 ejemplares de los quelonios fueron encontrados sin vida a la vera de este oasis, donde los cetáceos dan a luz y realizan su ritual de apareamiento.
Según el reporte proporcionado por la Procuraduría, se descubrió el infortunado hallazgo durante un recorrido efectuado por la laguna, encontrando a más de un centenar de la especie chelonia midas agassizii, la cual se presume pereció en la zona debido a la hipotermia, es decir, por las bajas temperaturas que se registran en la región por los frentes fríos de la temporada.
Inspectores de la Procuraduría detectaron los cadáveres de las tortugas a los largo de 20 kilómetros, en el área conocida como el Remate de la laguna, donde se implementó una búsqueda que llevara a una posible fuente de contaminación o indicios con los cuales se presumiera la causa de muerte.
En cuanto a la condición de esta especie marina, sus cuerpos se encontraban en un avanzado estado de descomposición, es decir, hinchadas, con sus tejidos reventados y secos, lo cual impidió que se pudieran realizar análisis de laboratorio.
Cabe señalar que la mayoría de los cuerpos estaban enteros, siendo algunas desmembradas presuntamente por algunos coyotes tras aproximadamente cinco días de permanecer los cuerpos de los quelonios sin vida.
Este evento, se suma a otros tres, en los que se ha dado la mortandad de especies marinas en lo que va de este año, pues el 13 de enero se encontraron catorce cadáveres de ballena gris y 16 tortugas marinas de la especie tortuga prieta.
Por esta razón, se mantiene una hipótesis sobre que las tortugas marinas por ser ectotérmicas, requieren del calor de su medio como energía para poder llevar a cabo actividades diarias, ante lo que un estudio realizado refiere a la mortandad por frío paralizante o cold-stunning, en el cual las tortugas juveniles y subadultas, son susceptibles de morir por la exposición continua y prolongada a bajas temperaturas, sobre todo en la madrugada, afectando principalmente a especimenes migratorias.
Finalmente la Profepa anunció que ya se han puesto en marcha las labores de investigadores del Centro de Investigaciones Biológicas del Noroeste, que estarán a cargo de atender esta situación y conocer más sobre las causas de muerte de las tortugas marinas en Ojo de Liebre.
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