La instalación de la planta de BMW en San Luis Potosí, que previsiblemente iniciará operaciones en 2019, impulsará la llegada de proveedores de la industria automotriz de origen alemán entre los próximos doce y dieciocho meses, indicó Miguel Barreda, de Lintel y director del Parque Industrial Colinas de San Luis.
Con el anuncio de la instalación de la planta, los precios de los terrenos en los alrededores se incrementaron de 29 dólares el metro cuadrado a más de 35 por la necesidad de contar con reservas territoriales en las inmediaciones de la armadora, indicó.
En el recinto, ubicado a 40 kilómetros de la futura planta de BMW, ya operan cuatro empresas automotrices y otras cinco están en proceso de construcción.
Entre las que ya se encuentran en funcionamiento figura la japonesa Keihin, el primer cliente del parque que a modo de «empresa ancla» promovió la instalación del resto.
En un área de 30 mil metros cuadrados, la planta de North American Lighting México se encarga de la fabricación de los focos para la mayoría de las ensambladoras instaladas en el país.
La planta de SIX desarrolla controles para aplicación automotriz como alarmas o termostatos y NAX MFG, que adquirió un área de cinco hectáreas de extensión donde va a construir su segunda nave en el parque.
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