By Aunque todo el mundo ha aprendido que el futuro es impredecible, aquí hay cuatro aprendizajes que los líderes deberían tener en su radar para construir una mejor cultura de empresa en el futuro.
Se habla de que todos en algún momento, por las exigencias y dinámica del mundo, debemos de ser líderes. Pero ¿cómo hacerlo de la manera correcta?
Aquí en Campestre te decimos las cuatro tendencias que serán fundamentales para lograr éxito en el futuro.
En los últimos años, el liderazgo empresarial ha experimentado un enorme cambio con la irrupción de la llamada Generación Z, quienes, con su fuerza de trabajo fueron un factor clave para iniciar esta transformación masiva.
Y seamos sinceros, en la actualidad, los tiempos exigen líderes que estén dispuestos a colaborar en lugar de intimidar, como en antaño era una cuestión casi religiosa en miles de empresas.
Como resultado para esas empresas que dirigían sus operaciones basadas en infundir miedo, la puerta giratoria de empleados que entraban y salían continuamente del edificio, era parte del día a día.
Ahora, los cambios que los líderes estaban llevando a cabo al comenzar una nueva década en 2020 iban en la dirección correcta, dando paso a la colaboración, la creatividad y la flexibilidad.
¡Pero! Nos llegó la pandemia y entonces todo cambió. Los empleados, abrumados por todo lo que ocurrió, buscaron orientación en los líderes.
Desgraciadamente, y para ser sinceros, muchos líderes fallaron y cometieron algunos errores graves que deberían haberse evitado.
Por ello, el liderazgo, al igual que el mundo, ha cambiado irremediablemente.
Aunque todo el mundo ha aprendido que el futuro es impredecible, aquí hay cuatro aprendizajes que los líderes deberían tener en su radar para construir una mejor cultura de empresa en el futuro.
1. El valor que nos da abrazar la diversidad
Volviendo al 2020, un estudio efectuado por McKinsey reafirmó lo que muchos observadores sabían desde hace tiempo: “las empresas con diversidad cultural y étnica son más rentables que las homogéneas”.
Por ello, es indispensable que los negocios adopten la diversidad en todo. En esta era, es simplemente un negocio inteligente que las empresas construyan una cultura tan diversa como los empleados -y los clientes- que quieren atraer.
Las técnicas de selección a ciegas y la formación sobre prejuicios implícitos pueden ayudar a los directivos a evitar gravitar inconscientemente hacia los candidatos que tienen el mismo aspecto y piensan como ellos.
Los clientes aceptarán las marcas que valoren la diversidad real en todos los niveles.
2. La importancia de poder enseñable
Sí, hay que decirlo, porque en ocasiones puede llegar a la confusión: los líderes no tienen todas las respuestas y pretender que las tienen sólo inhibirá el crecimiento.
Jamás hay que olvidar que siempre habrá alguien, así sea un colega, un cliente, un joven empleado, un nuevo practicante, que sabrá algo que tú no sabes.
Y aquí se le da paso a la humildad, porque es sorprendente lo que se puede aprender en un momento así, siempre que se esté abierto a la posibilidad. Los que no han sido humillados por los recientes acontecimientos mundiales están condenados al fracaso.
Los buenos líderes deben estar de acuerdo en reconocer los errores, identificar las lecciones aprendidas y volver al trabajo.
Los empleados que lo vean pasar se volverán más resilientes y estarán dispuestos a asumir también mayores riesgos.
3. La importancia de la salud mental
En México y América Larta parece que, de manera sistemática, se deja al olvido y no se valora lo suficiente la salud mental, por ello, los líderes deben evitar el mismo desprecio en el lugar de trabajo.
Ante un panorama en el que una empresa no anteponga la salud mental de sus empleados, aparece la dimisión. Ya no son tiempos en los que los trabajadores puedan permitir que el estrés pase factura a su salud mental.
Así que, a menos que quieran que su proyecto o negocio sea víctima de la Gran Dimisión, tendrán que asegurarse de que su empresa atiende las necesidades de salud mental de sus empleados.
La salud mental no es una propuesta única para todos. Algunos empleados pueden valorar el acceso a terapeutas; otros pueden beneficiarse de la flexibilidad de horarios o del trabajo desde casa.
El respeto a las diferencias en materia de salud mental, como a cualquier otra, es una prioridad de liderazgo a largo plazo.
4. La necesidad de encontrar oportunidades de crecimiento profesional
Hay una cuestión que muchos jefes no pueden y no quieren entender: el crecimiento profesional.
Por ello, los líderes deberían entender que los empleados necesitan espacio y oportunidades para crecer.
Al fin y al cabo, la mayoría probablemente comenzó su vida profesional en un peldaño inferior al que ocupa ahora.
Cuando los trabajadores no ven ningún camino para el desarrollo y el avance profesional en su empresa, es más probable que se unan al éxodo masivo actual.
En las reuniones individuales con sus empleados, pregúnteles sus objetivos y aspiraciones profesionales.
Al final, si se siguen todos estos pasos, además de personas más felices, como resultado tendrá empleados más productivos.
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