By La tormenta tropical «Odile» impactará en las próximas horas las costas del estado mexicano de Sonora con vientos y rachas de hasta 95 kilómetros por hora y oleaje elevado por lo que las autoridades mantienen la alerta máxima.
El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) precisó en su reporte de las 07.15 hora local(12.15 GMT) que el centro de «Odile» llegará a Sonora en unas nueve horas.
Las lluvias intensas generadas ya hay comenzado a afectar a esta zona del noroeste de México por lo que se mantiene la alerta roja en el oeste de ese estado y en el sur de Baja California.
Esta mañana el fenómeno meteorológico se ubica a 90 kilómetros al noroeste de Puerto Libertad y a 100 kilómetros de Puerto Peñasco, ambas en el estado de Sonora, y se desplaza a 9 kilómetros por hora con vientos sostenidos de 75 kilómetros por hora y rachas de hasta 95 kilómetros.
El SMN indicó que «Odile» generará lluvias intensas, de 75 a 150 milímetros, en áreas de Sonora; muy fuertes, de 50 a 75 milímetros, en Baja California; fuertes, de 25 a 50 milímetros, en localidades de Sinaloa, y lluvias bajas, de 0,1 a 25 mm, en algunos puntos de Baja California Sur.
Además, se prevén fuertes vientos con rachas de hasta 90 kilómetros por hora y oleaje de 3 a 5 metros de altura en el norte del Golfo de California y costas de Baja California y Sonora.
Las autoridades mantienen la alerta por efectos de tormenta tropical en la costa oriental de la península de Baja California, desde San Felipe hasta Santa Rosalía y en la costa de Sonora, desde Guaymas hasta Puerto Peñasco.
Por su parte, la tormenta tropical «Polo» se ubica a 295 kilómetros al sur de Zihuatanejo, en el estado de Guerrero, y a 310 kilómetros al sur de Lázaro Cárdenas, en Michoacán.
«Polo» avanza hacia el noroeste a 19 kilómetros por hora, con vientos máximos sostenidos de 85 kilómetros por hora y rachas de hasta 100 kilómetros.
El SMN indicó que «Polo» generará lluvias intensas, de 75 a 150 milímetros en los estados de Jalisco, Colima, Michoacán y Guerrero; muy fuertes, de 50 a 75 milímetros, en Oaxaca y Puebla; fuertes, de 25 a 50 milímetros, en Hidalgo, Estado México, Morelos, Querétaro y Guanajuato, y menores en zonas de Tlaxcala y el Distrito Federal.
De manera simultánea, las autoridades atienden los impactos y daños que dejó «Odile» en el estado de Baja California Sur, donde quedaron varados unos 26.000 turistas en la zona de Los Cabos, y se evacuaron a unas 11.000 personas aunque no se registraron víctimas mortales.
El Gobierno mexicano comenzó a desalojar a los turistas que permanecieron en los 165 albergues o en los 31 hoteles convertidos en refugios temporales, a través de puentes aéreos con aviones de las Fuerzas Armadas y de líneas aéreas comerciales.
Los turistas comenzaron a ser trasladados a las ciudades de Tijuana, Mazatlán, Guadalajara y Ciudad de México y desde allí hacer las conexiones con sus ciudades de procedencia.
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