Por: Mtro. Gabriel Arellano Dueñas, director de SPIA
Asesor patrimonial:
«Recomiendo implementar un proceso de control de confianza permanente para el personal, especialmente para el primer círculo de colaboradores. Esto es esencial para prevenir impactos negativos en el patrimonio de la empresa. ¿Qué opinas?».
Director o propietario: (respuestas más frecuentes)
- «Oye, pero es mi gente de confianza de toda la vida».
- «Meto las manos al fuego por Mary, tiene todos los años del mundo con nosotros».
- «¿Cómo crees? Si es mi familia».
- «¿No se sienten ofendidos con esos procesos?».
Estas respuestas típicas de los dueños o directores de empresas de todos los tamaños contrastan con los siguientes datos:
En México, las pérdidas económicas relacionadas con el robo interno, fraudes y otras formas de deslealtad laboral son significativas. Según Deloitte, las organizaciones a nivel mundial pierden aproximadamente el 5% de sus ingresos anuales debido a fraudes, y cada incidente puede causar pérdidas promedio de $145,000 USD, con más del 20% de los casos involucrando pérdidas de al menos $1 millón USD.
Situación en México
Una encuesta nacional realizada en 2021 por la consultoría Vestiga reveló que el 14% de las empresas mexicanas reportaron fraudes internos en 2021. Las áreas más afectadas fueron:
- Proveedores y compras (36%)
- Administración y tesorería (31%)
- Operaciones (23%)
Las causas principales incluyen fallas en la gestión, estructuras organizacionales inadecuadas y deficiencias en políticas y controles antifraude.
Impacto económico
Se estima que el 2% del PIB de México, equivalente a 27.4 mil millones de dólares, se pierde debido a la aplicación deficiente de medidas de control de confianza en las empresas.
Factores de riesgo
La posibilidad y probabilidad de que alguien cometa algún acto deshonesto está influenciadas por diversos factores endógenos y exógenos. Es crucial comprender que todas las personas
enfrentamos factores precipitantes y detonantes individuales y que se encuentran presentes en todo momento en nuestra persona. Los factores detonantes predisponen a conductas deshonestas a largo plazo, mientras que los precipitantes actúan como desencadenantes inmediatos.
Comportamiento humano y medidas preventivas
Una persona que se ha conducido con honradez durante su vida laboral puede, en circunstancias cambiantes, verse motivada a cometer un delito. Saber que en su entorno laboral se aplican de manera constante evaluaciones de confianza, puede ser un factor que regule su conducta o bien pueden llevar al individuo a buscar un entorno donde no enfrente esta “amenaza” y se sienta más cómodo para actuar sin esta “presión”.
Con base en esta perspectiva y esta contrastante información, resulta evidente la imperiosa necesidad de implementar medidas disuasivas aleatorias pero permanentes, para incidir en la conciencia de los colaboradores. No sobra decir que es importante que este tipo de estrategias se realicen con apoyo de expertos externos, para evitar conceder cotos de poder internos a personal no capacitado para el manejo de estos asuntos, ya que esto pudiera ser contraproducente.
Industrias de alto riesgo
Si bien estas conductas están presentes en todas las industrias, algunas son más vulnerables debido a su operación, como lo son las que involucran distribución o transporte, por su grado de exposición al riesgo o bien por el tipo de insumos utilizados en su operación.
Los factores clave para que se lleve a cabo un acto delictivo son la oportunidad y la fácil convertibilidad en efectivo de lo sustraído.
Herramientas preventivas
Existen diversas herramientas preventivas como:
- Investigaciones domiciliarias
- Evaluaciones poligráficas
- Antidopings
- Revisiones de procesos
- Pláticas de concientización
- Psicometrías
La aplicación sistemática de estas herramientas crea un ecosistema de confianza mutua entre colaboradores, la empresa y sus clientes. Comunicar estas prácticas a los clientes genera valor agregado, mismo que puede ser capitalizado comercialmente con los socios comerciales ya que genera confianza en nuestra empresa la cual estará representada en cada acto, por colaboradores confiables.
Al final, la implementación de prácticas de control de confianza debe ser parte integral de los procesos de contratación y permanencia en todas las empresas de México y LATAM. Esto no sólo protege el patrimonio de la empresa, sino que también fomenta un ambiente de trabajo ético y seguro, vital para el éxito a largo plazo.
Asesor patrimonial:
“Y después de conocer esta información, ¿Qué opinas?”
Director o propietario:
“………..”
“En 9 de cada 10 hechos delictivos, la víctima conoce al victimario material o intelectual”. “La seguridad no se nos da hecha, hay que construirla”.
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