By Con este megaproyecto, Ensenada se prepara para ofrecer una experiencia turística única, combinando la belleza natural, el desarrollo sostenible y una rica oferta cultural y gastronómica.
Un ambicioso megaproyecto denominado Colorado Ensenada está en marcha, prometiendo revolucionar la oferta turística en el sur del puerto de Ensenada.
Esta iniciativa, liderada por un grupo diverso de empresarios, académicos y el Arzobispado de Baja California, se enfoca en fortalecer la Ruta del Queso y el Vino y en desarrollar un estilo de vida en armonía con la naturaleza.
Según Verónica Sigala, Directora Jurídica de Colorado S.A. de C.V., el proyecto de 855 hectáreas, situado en el Kilómetro 53 de la carretera Ensenada-Mexicali, busca establecer una comunidad autosustentable que incluirá actividades de ecoturismo, agricultura endémica, un centro de investigación y una casa de retiro para los sacerdotes de la Iglesia Católica de la región.
El proyecto, dividido en tres etapas, comenzó el pasado 2 de enero con la zonificación de un centro histórico y la instalación de una mesa directiva. Se ha puesto la primera piedra de una parroquia liderada por el Arzobispado, encabezado por Francisco Moreno. «Ser parte de este destino emergente es un honor», dijo Moreno.
Una característica distintiva de Colorado Ensenada serán los dos teleféricos, que ofrecerán una vista panorámica del destino. Además, se planea cultivar productos locales como nueces, manzanas y piñones en un área de 100 hectáreas, fomentando así la agricultura local y la producción de queso artesanal.
La segunda fase del proyecto incluirá una pista de aterrizaje para aviones privados, un helipuerto y la ruta de senderismo más grande de Baja California, con más de 85 kilómetros. «Este lugar no solo será un destino turístico, sino también un hogar para las familias, ofreciendo un estilo de vida 100% autosustentable y seguro», agregó Sigala.
El Mtro. Armando Islas, de la Universidad Autónoma de Baja California, resaltó la inclusión de programas académicos, un centro de investigación y un observatorio en el proyecto. «Es una oportunidad única para nuestros estudiantes y para la conservación de la flora y fauna local», concluyó Islas.
Con este megaproyecto, Ensenada se prepara para ofrecer una experiencia turística única, combinando la belleza natural, el desarrollo sostenible y una rica oferta cultural y gastronómica.
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