Las autoridades alemanas prohibieron toda actividad en nombre del grupo extremista Estado Islámico, como la distribución de material de propaganda y la difusión de sus símbolos.
El decreto emitido el viernes cerró un vacío legal que hacía difícil procesar a los partidarios del Estado Islámico en Alemania.
El ministro del Interior, Thomas de Maiziere, dijo en un comunicado que el grupo representa una «amenaza para la seguridad pública en Alemania» y que resultaba necesario detener sus esfuerzos de reclutamiento.
Los organismos de seguridad estiman que al menos 400 personas procedentes de Alemania se han unido al grupo Estado Islámico y otras organizaciones similares.
El periódico Westdeutsche Allgemeine Zeitung informó esta semana que un alemán identificado solamente como Silvio K. había publicado amenazas en video contra Alemania debido al apoyo del gobierno alemán a los curdos que luchan contra Estado Islámico.
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