Errores que hacemos para evitar no engordar en Navidad

Las personas que están a dieta, normalmente se saltan la primer comida del día, creyendo que con esto lograrán bajar de peso más rápido. Sin embargo, se ha comprobado que aquellos que desayunan consiguen perder más peso y mantenerlo. Desayunar de manera saludable te ayudará a sentirte satisfecha a lo largo del día y te será mas sencillo resistirte a la tentación de comer demasiados bocadillos navideños.

2. Confiar demasiado en el ejercicio.
El ejercicio es un gran complemento cuando estás a dieta, sin embargo, es muy fácil sobrestimar las calorías que quemas. Correr 30 minutos te ayudará a quemar unas 300 calorías, pero una copa de natilla tiene las mismas 300 calorías. De todas formas ejercitarte te mantendrá por el buen camino, pero no asumas que puedes comer todo lo que quieras sólo porque luego harás ejercicio. Todo se trata de mantener un balance. 

3. Subestimar tu consumo de calorías.
Seamos realistas: ir a una fiesta de Navidad y moderarte en lo que comes, implica disciplina, especialmente cuando hay un buffet para servirte. Da una vuelta para ver todo lo que hay antes de escoger y sé selectiva. Cuando vayas a una fiesta de varias horas, contrólate. 

4. Eliminar carbohidratos.
Muchas chicas creen que eliminar los carbohidratos de sus dietas es la clave para perder peso. Pero los días fríos de invierno no son los indicados para quitar la pasta y el pan de tu vida, pues éstos ayudan a producir serotonina, el químico que genera un sentimiento de bienestar en el cerebro. Elige carbohidratos complejos y de granos enteros para mantener tu espíritu navideño y tu dieta balanceada. 

5. Tomar demasiado alcohol.
Si estás intentando mantener la línea a lo largo de las vacaciones, limita tu consumo de alcohol. No se escucha tan divertido, pero por lo menos no tendrás que lidiar con las horribles resacas. ¡Escoge tu drink favorito y intenta no tomar mucho!

6. Privarte completamente de los antojitos navideños.
Las fiestas y vacaciones están llenas de bocadillos engordadores, como natillas, galletas rellenas de mantequilla, chocolates… mmm. Negarte estas delicias, puede jugar en tu contra, puedes acabar harta y comiendo toda la comida grasosa y azucarada que encuentres. Mejor, elige algún manjar de éstos, pero fija algunos límites, como la porción o la frecuencia. Así, podrás disfrutar las delicias navideñas y seguirte viendo increíble.