By La aerolínea KLM tuvo una genial idea para ayudar a sus pasajeros.
Volaste nueve horas y apenas pudiste dormir una. El resto del tiempo adentro del avión lo pasaste con un señor que no cesó de estornudar sobre ti, un bebé que lloró porque el avión despegó, voló y aterrizó, y por supuesto, tu Kindle se quedó sin batería porque olvidaste cargarlo antes de viajar. Enfadado, lo guardaste donde están las revistas de la aerolínea y al bajar del avión lo olvidaste.
¿Te suena familiar? La mayoría nosotros hemos vivido alguna situación parecida por lo que la inventiva de la gente en KLM nos parece perfecta.
Te diste cuenta tarde. Ya te das por vencido.
Se trata de Sherlock, un perro de raza beagle que fue entrenado para olfatear objetos, cargarlos en su chaleco especial y encontrar al dueño del ítem perdido en medio de un aeropuerto lleno de gente.
Cuando una empleada dice que Sherlock puede ayudar a los pasajeros en formas que nadie más puede se refiere a que puede deslizarse por las cintas magnéticas que entregan el equipaje.
Te dejamos el vídeo para que te entretengas con este pequeño compañerito que te quitará esa ansiedad después de un cansado vuelo.
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