By El enólogo Eduardo Córdova Kruger, cuenta con 12 años en la industria vinícola de Valle de Guadalupe y más de 9 trabajando en su propio proyecto. Su lema es “Vinos con alma de Tierra”.
Para el enólogo Eduardo Córdova Kruger, el mejor vino es aquel que encuentras experimentando.
En entrevista para CAMPESTRE, expresa que, al realizar continuamente degustaciones y catas de vino, cada paladar encuentra la acidez, retrogusto y textura favorito. Por eso su mejor recomendación es encontrar tu vino favorito al estudiar cada copa.
“Vivo una etapa de gran crecimiento, tanto de mi propia marca cómo personal, pues siempre estoy dispuesto a seguir preparándome”, afirma el enólogo, quien recién cumple 9 años trabajando en Kruger, vinos con alma de tierra, una marca en la que invierte toda su experiencia en vinos.
Cabe destacar que es enólogo titulado en Tarragona España, lo cual, afirma, le da una mayor perspectiva a la hora de crear vinos innovadores. Pone como ejemplo, que en Ensenada aumenta la temperatura durante los últimos días de la vendimia, lo que puede suponer una pérdida de acidez para el vino.
Sin embargo, al contar con el conocimiento químico de la fermentación, es posible realizar correcciones artificiales al producto. Aunque también explica que en pocas ocasiones debe realizar esta corrección, gracias a las precauciones que toma en cada etapa de la producción del vino.
Con todo el apoyo de su familia, Eduardo afirma que esta es una etapa muy satisfactoria para él, pues puede desarrollar el vino que su paladar pida. De esta manera puede ofrecer vinos gourmet para los gustos más exigentes. Asimismo, destaca que en Valle de Guadalupe son necesarios más enólogos titulados, esto debido al gran crecimiento en la zona.
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