Un dron estadounidense atacó y destruyó hoy un puesto de morteros perteneciente al grupo yihadista Estado Islámico (EI) y que disparaba sobre tropas kurdas cerca del monte Sinyar, en el norte de Irak, informó el Pentágono.
El Mando Central de Estados Unidos encargado de Oriente Medio emitió un comunicado para informar de un nuevo ataque «exitoso» dentro de la campaña de bombardeos selectivos ordenada la semana pasada por el presidente Barack Obama.
Hacia las 15:55 EDT de hoy, «una aeronave estadounidense pilotada de forma remota atacó y destruyó una posición de lanzamiento de morteros de EI que estaba disparando a las tropas kurdas que defienden a los civiles yazidíes internamente desplazados que estaban intentando evacuar» el monte Sinyar, indica el comunicado.
El Mando Central no proporcionó más detalles sobre la operación, y señaló únicamente que todas las aeronaves estadounidenses «abandonaron de forma segura el área».
Estados Unidos inició el pasado viernes una serie de bombardeos selectivos para detener el avance de EI, que lucha desde hace dos meses en el norte de Irak para ampliar su declarado «califato» y se aproxima a Erbil, la capital de la región autónoma iraquí del Kurdistán.
Se calcula que el avance de los yihadistas en Irak ha provocado la huida de unas 200.000 personas del área y que más de 40.000, en su mayoría yazidíes kurdos y cristianos, se encuentren todavía atrapados en el monte Sinyar y con necesidad urgente de agua, comida, refugio y medicinas.
Obama advirtió el lunes de que los aviones estadounidenses «siguen posicionados para atacar a cualquier fuerza terrorista alrededor de la montaña que amenace la seguridad» de los desplazados yazidíes.
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