Dr. Eugenio Carrasco IVEugenio Gene CarrascoTijuana

Don Roberto 20 años después.

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Entrevista escrita por Eugenio Gene Carrasco en junio de 1999

La presencia del señor don Roberto de la Madrid, quien fuera gobernador de Baja California hace ya dos décadas, no deja de tener gran importancia para todos los bajacalifornianos en el foro de la confrontación política que estamos atestiguando por estos días.

Las prisas de Don Carlos.

La entrevista no podía omitir el cadente asunto de Libre Comercio, que en realidad hasta ahora no nos ha beneficiado mucho sino ¨todo lo contrario¨, para ir con la acuñada frase por todos conocida-. Al respecto, el señor de la Madrid Romandia, expone: ¨Estimo que el licenciado Salinas de Gortari se apresuró violentamente y sin justificación al Tratado de Libre Comercio, por un interés político personal: no obstante habérsele advertido que los resultados serían muy lesivos para el país ya que no estábamos preparados para competir comercialmente con el país más poderoso del mundo¨.

¿Cómo observa usted los resultados, don Roberto? ¨Nuestra industria no estaba preparada y cuando entro la importación masiva vino a desplazar la producción nacional¨.

¿Cuál cree usted que debió haber sido la medida correcta? ¨Bueno, pienso que debió haberse promovido la coinversión con el extranjero para desarrollar nuestra propia industria¨. Ahora ya no es un ¨secreto de Estado¨ y, aunque don Carlos Salinas de Gortari no prometió buenos resultados del Tratado a corto plazo (profetizo que apenas en 15 años se verían los beneficios), todos sabemos que sus prisitas por ¨adornarse¨ internacionalmente y quedar bien con el vecino para obtener el nombramiento que anhelaba ¨ ganar la historia¨, pudieron ser la ¨justificación¨ que reclama el señor de la Madrid.

¨Luego, cabalgamos¨

El mal endémico de todo México (y de no pocas metrópolis del mundo entero) es la inseguridad. Tijuana no podía ser la excepción y hasta es de creerse que ello sea, junto con su crecimiento y pretendida bonanza, parte del pago y su progreso. Don Roberto conviene en esto, pero señala flamígero acento que ¨ha faltado energía a las autoridades actuales para actuar contra el crimen organizado¨, o sea: una de las lacras de que comúnmente se acusa a nuestra fronteriza urbe, pues más a que no poder, parecer el ¨no querer¨ parar a fondo los desmanes que tiene atemorizada a la sociedad del estado, ante la falta de seguridad. Estima, asimismo, que solicitar ayuda del gobierno federal en este sentido pone en tela de juicio la soberanía del estado. Se refirió también a la importancia que en el desenvolvimiento de Tijuana han tenido dos obras en las que muy activamente participo su amigo y protector don José López Portillo; nos referimos a las obras de Río Tijuana y a la nueva garita de Otay. Recuérdese que JLP fungió como director nacional de Juntas Federales de Mejoras Materiales que se responsabilizaron de la urbanización del sector.

Por otra parte, nuestro entrevistado señaló que a fin de ubicar a la nueva industria que surgió, procedente de fuera, particularmente del país vecino, durante su administración desarrollo el Parque Industrial de Otay que ahora parece ser insuficiente para albergar la multitud de factorías que lo integran; esto, claro, ha dado lugar al mayor número de maquiladoras en todo el país, cuya mano de obra se estima de los 170 mil trabajadores que cubre este importante renglón laboral en la nación. La conclusión es, pues, que con todo y nuestros ¨achaques sociales¨ y limitaciones económicas, etc. ¨ahí la llevamos¨, o como digiera el divino orate de la Mancha: ¨ ¡Luego, cabalgamos!

Se sacó la lotería

Don Roberto, pues ya que en plano de las confidencias, relata cómo su amigo, el licenciado López Portillo, siendo Presidente de la Republica, le llamó de Los Pinos para proponerle la gubernatura de Baja California, donde la candidatura del General Hermenegildo Cuenca Díaz era totalmente impopular. ¨Pienso que el licenciado deseaba, entre otras cosas, vindicarse con los bajacalifornianos que muchas veces manifestaron su desagrado por Cuenca. Cuando le pregunte el porqué de tan importante determinación, me explico llanamente: ¨no había accedido a las peticiones de la Baja California por que se había tomado una decisión anterior y había que respetarla¨. Fue así que, tras una fructuosa temporada al frente de la Lotería Nacional, ¨Bob¨, como afectuosamente le llaman sus allegados, vino a gobernar esta parte de la frontera, siempre con el apoyo moral y material de don JLP, quien por cierto, cumplió muchas de las promesas sobre importantes obras materiales en Baja California, entre las que destacan obras de canalización y urbanización.

Es apolítica.

Tema impredecible para tratarlo con don Roberto, ahora que estamos en la recta final de importantes comicios; ¨Hay dos campañas importantes: la del Distrito Federal por la gubernatura que antes fue departamento y en la que solo hay dos fuerzas políticas a la vista: el PRI y el PRD. Por otro lado, está la campaña por el Poder Legislativo donde figuran tres fuerzas políticas que buscan la mayoría del Congreso de la Unión. Don Roberto estima que en el DF se aprecia un equilibrio entre las fuerzas señaladas, pero que hay una propensión a la victoria del PRD, mientras que en la Cámara todo parece favorecer al partido oficial. Con ese su envidiable sentido del humor que le caracteriza, el viejo político comenta: ¨ya se sabe que nunca ha sido conveniente cambiar de canoa a medio río¨.

Como debe entenderse el cambio.

Denotando un espíritu abierto al movimiento democrático, el ex gobernador de Baja California opina que el foro político, tanto el partido oficial (PRI), como el PAN deben cambiar sus procedimientos y hacer las cosas ¨de otra manera¨ (es decir, con rectitud), a fin de reconquistar la confianza del pueblo. Señaló que, tanto uno como el otro partido han cometido errores que es preciso corregir y ajustar su conducta a la forma en que la ciudadanía lo reclama. Por lo demás, en el aspecto económico considera que, pese haberse tomado una decisión apresurada en torno a la aplicación del Tratado de Libre Comercio, nuestro desarrollo industrial, particularmente en lo que a maquiladoras se refiere, es incontrastable, aunque nos haya tomado desprevenidos. Don Roberto de la Madrid Romandía expresa algo que acaso resulten proféticas: ¨Puede ser que el PRD gane el gobierno del Distrito Federal, pero estoy seguro de que se va a ganar el Congreso para el PRI¨. Veremos y diremos.

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