By El líder chino, Xi Jinping, prometió este viernes importar más petróleo y gas natural de los estados árabes del Golfo ricos en energía sin interferir en sus asuntos, probablemente tratando de colocar a Beijing bajo una luz más favorable que Washington.
Xi también instó a los países árabes a realizar ventas de energía con el yuan chino, lo que podría desviar el dólar estadounidense de las transacciones en una región donde Estados Unidos todavía coloca miles de tropas en una red de bases locales como cobertura contra Irán.
El enfoque de no intervención de China podría atraer a líderes como el príncipe heredero saudita Mohammed bin Salman, quien está listo para gobernar el reino rico en petróleo durante posiblemente décadas, incluso después de enfrentar críticas internacionales generalizadas por el asesinato del columnista del Washington Post Jamal Khashoggi y el todavía -La furiosa guerra en Yemen.
Durante la visita de Xi a Arabia Saudita esta semana, el propio príncipe le dio la bienvenida a una reunión del clubby Consejo de Cooperación del Golfo y luego a una cumbre más amplia de líderes de Medio Oriente.
“De pie en la encrucijada de la historia, debemos renovar la tradición de amistad entre China y el CCG”, dijo Xi.
La visita de Xi se produce cuando China depende de los estados árabes del Golfo, en particular Arabia Saudita, para importar miles de millones de dólares en petróleo crudo para impulsar la economía de su país mientras trata de salir lentamente de su estricta política contra el coronavirus. Xi enfrentó protestas en su casa justo antes de su llegada a Riad que representan el desafío más serio a su gobierno después de que se le otorgó un tercer mandato de cinco años como líder del Partido Comunista.
“El reino cree que las fuentes de energía de hidrocarburos seguirán siendo un recurso importante para satisfacer las necesidades del mundo en las próximas décadas”, dijo el Príncipe Mohammed.
El crudo Brent se negoció el viernes alrededor de $ 76 por barril, por debajo de los máximos de $ 122 en junio. Los precios más altos podrían hacer realidad los sueños del príncipe de una ciudad futurista de Neom de $ 500 mil millones en el Mar Rojo para reformar la economía saudita. Pero el aumento de los costos en la bomba meses antes alejó aún más a la administración del presidente Joe Biden de Riad, algo que el príncipe probablemente tuvo en cuenta durante la visita de Xi.
Xi elogió a los países del CCG (Bahrein, Kuwait, Omán, Qatar, Arabia Saudita y los Emiratos Árabes Unidos) ya que «buscaron activamente soluciones políticas para los puntos críticos regionales» e invitaron a sus astronautas a la nueva estación espacial Tiangong de China.
Xi también dijo que China planea construir un Centro de Demostración de Seguridad Nuclear conjunto China-CCG que capacitará a 300 personas en seguridad y tecnología nucleares. Los Emiratos Árabes Unidos ya tienen la planta de energía nuclear de Barakah, construida con Corea del Sur bajo un acuerdo estricto de que no enriquecerá uranio, un posible camino hacia un arma nuclear.
Pero quizás lo más importante para los estados del Golfo, Xi enfatizó que su nación seguirá siendo un importante comprador de su petróleo.
«China continuará importando una gran cantidad de petróleo crudo de los países del CCG, ampliará las importaciones de gas natural licuado, fortalecerá los servicios de ingeniería en el desarrollo upstream de petróleo y gas y la cooperación en almacenamiento, transporte y refinación», dijo Xi.
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