Vecinos de los fraccionamientos Fortín de las Flores, San Antonio y Santa Elena, en la delegación La Mesa, se dijeron preocupados ante la próxima apertura de un albergue para migrantes en la zona habitacional que además alberga una primaria estatal y un preescolar particular.
Lo anterior, ante los de por sí constantes atracos de los que son víctimas por parte de habitantes de la canalización del Río Tijuana que han encontrado en el sitio una forma de sobrevivencia hurgando en la basura de los vecinos, pidiendo limosna en la zona o hasta robando baterías para satisfacer su adicción.
Alfa de Juárez, presidenta del Comité de Vecinos de Fortín de las Flores, fraccionamiento ubicado en los alrededores de la Plaza Carrusel y Vía Rápida Poniente, señaló la preocupación que tienen de que el albergue de Ejército de Salvación que se acondiciona en las instalaciones de un antiguo preescolar privado, atraiga aún más habitantes de la canalización a la zona.
No se trata de una actividad totalmente altruista, dijo, porque los encargados del albergue deberán pagar una renta de 18 mil pesos mensuales que pudieran cubrir en un lugar apto y no en este sitio con uso de suelo habitacional, con escuelas y que ya ha sido impactado con comercios.
Comentó que como tijuanenses de arraigo con varias generaciones habitando la zona, no están en contra del apoyo a migrantes, pero sí les inquieta que a raíz del albergue incremente más el tránsito de habitantes de la canalización en estado crítico que constantemente hurgan basura, intentan abrir carros, roban baterías e impiden hasta acudir a la tienda una vez que cae el sol.
El Mexicano
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