Especialistas en materia económica anticipan que el comienzo del 2015 será de sufrimiento económico para la población, pues a pesar de que incrementó el salario mínimo, dicho aumento no es sustancial, lo que podría extender la cuesta de enero hasta finales de marzo.
A pesar del 4.2 % de aumento al salario (que en términos reales es de 3 pesos), éste solo sirve para no dejar de perder, pues ese recurso no te alcanza para comprar más, sino lo mismo, digamos que se tiene un efecto de neutralidad, dijo el fiscalista Adolfo Solís Farías.
Por consecuencia, el arranque del próximo año será difícil, por lo que el gobierno (los tres órdenes) jugará un papel fundamental para generar las condiciones de crecimiento y desarrollo que el estado y su población requieren, advirtió.
El salario mínimo no alcanza para satisfacer las necesidades básicas de la familia, el costo de vida ha aumentado y se generan condiciones que impactan de manera negativa el bolsillo de los consumidores, añadió.
Para el economista, Jorge Fonseca, el incremento al salario mínimo se “pulveriza” con la inflación y el aumento de precios que se avecinan para el siguiente año, por ejemplo el 5 % en la tarifa del agua.
Esta situación afectará en mayor medida a quienes menos tienen, podemos anticipar que la denominada cuesta de enero, podría extenderse hasta el mes de marzo, anticipó el economista Jorge Fonseca.
El especialista recordó que tan solo en el 2014, el poder adquisitivo de los bajacalifornianos se vio mermado en promedio un 20 %, por lo que se deben implementar mecanismos para revertir esta situación.
Para concluir, ambos especialistas coincidieron en señalar que el gobierno deberá implementar estrategias para amortiguar los efectos de la cuesta de enero y generar mejores condiciones de vida para los bajacalifornianos.
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